Como ya está suficientemente comprobado a nivel espiritual, científico y paraspicológico, no hay ninguna muerte. Nadie muere por el hecho de dejar el cuerpo físico y pasar a otra dimensión. La vida continúa en otro cuerpo más sutil que no se enferma ni envejece, que no tiene defectos físicos. Cada vez que uno "muere" en el plano denso, nace en otro plano más superior. Así como, al venir al mundo, un bebé es asistido por médicos y enfermeras, también, al pasar de plano, recibe atenciones y cuidados.
Cuando alguien "muere", se va de viaje, por decirlo así, a un país distante por lo cual lo dejamos de ver durante algún tiempo. En ese país a donde él va, también hay diversas actividades que cumplir, experiencias y niveles de aprendizaje. Si el individuo se ha comportado en forma normal y correcta, siempre mejora su vida y las condiciones en que se encuentra. Las personas de nivel común van a la Cuarta Dimensión llamada Plano Astral y otros más avanzados alcanzan niveles más altos como el Plano Mental y los Planos Espirituales. Las condiciones del Plano Astral son superiores a las del Plano Físico donde vivimos, pues allí nadie tiene necesidad de trabajar para ganarse la vida, de comer, de beber, de dormir, no hay dinero, día ni noche y cada cual decide voluntariamente lo que quiere hacer. Por supuesto, si no quiere hacer nada, también se le permite por Ley de Libre Albedrío.
Cada ser que "ha muerto" sigue viviendo en otro cuerpo más fino, también con forma humana; pero tan sutil como el de esos "fantasmas" que han percibido los llamados "videntes". Ese cuerpo, aunque tiene piernas y pies, no camina como nosotros sino que se desliza a gran velocidad controlando voluntariamente su marcha. También tiene ojos, oídos, pelo y todo igual; pero su apariencia mejora considerablemente, se rejuvenece y no puede sentir dolor ni tener enfermedades. Las ocupaciones o actividades conocidas en la Tierra, pueden ser continuadas allá y otras también, excepto los negocios y transacciones económicas, porque allí no hay dinero. Si alguien no tuvo ocasión de aprender o realizar algo de su agrado, allí lo puede hacer, pues las oportunidades son mayores y mejores.
Como el Plano Astral es una continuación del Plano Físico y un lugar de tránsito entre encarnaciones, allí también están mezclados el bien y el mal. Todo lo bueno y malo de "Abajo", lo podemos encontrar también "Arriba" y hay que estar bien alerta. Los enemigos lo suelen a uno perseguir allí y los amigos también lo van a estar esperando después del cambio llamado "muerte", pues salen a recibir y a esperar para dar la bienvenida.
El Plano Astral se llama Cuarta Dimensión, porque allí todo es transparente. Además de largo, ancho y profundo, está esa dimensión de transparencia que hace los cuerpos traslúcidos. Nada es denso ni susceptible de ser golpeado o "matado" con un cuchillo o un arma cualquiera. Tampoco, nadie se puede suicidar arrojándose desde lo alto, porque queda como flotando en el espacio y no sufre choque alguno. Nadie puede mentir, porque se ven los pensamientos en forma de colores e imágenes mentales, ya que la Ley de Mentalismo funciona mejor que en este Plano Denso de "Abajo".
Nadie debe sufrir, llorar ni angustiarse, porque haya "muerto" o pasado de plano un familiar o persona querida, porque indudablemente, sigue viviendo en condiciones mejores según la Ley de Evolución.