Este Principio encierra la verdad de que todo se manifiesta en un determinado movimiento de ida y vuelta; en todo se manifiesta una oscilación media, un flujo y un reflujo, un movimiento semejante al del péndulo de uno a otro polo, según el principio de Polaridad, con el cual el Ritmo está estrechamente relacionado. El Ritmo se manifiesta entre los dos polos de todo. Esto no significa que la oscilación rítmica vaya hasta los extremos de cada polo, pues esto sucede muy rara vez; es muy difícil establecer los opuestos polares extremos en la mayoría de los casos. Pero la oscilación se efectúa hacia un polo primero y después hacia el otro polo. Siempre hay una oscilación, un avance y un retroceso, una elevación y una caída manifestándose en todas las cosas y fenómenos del universo. (C. Mendez)